domingo, 30 de mayo de 2010

CANCIÓN ÚLTIMA

Pintada, no vacía:
pintada está mi casa
del color de las grandes
pasiones y desgracias.
Regresará del llanto
adonde fue llevada
con su desierta mesa
con su ruidosa cama.
Florecerán los besos
sobre las almohadas.
Y en torno de los cuerpos
elevará la sábana
su intensa enredadera
nocturna, perfumada.
El odio se amortigua
detrás de la ventana.

Será la garra suave.

Dejadme la esperanza.


Miguel Hernández.

Poeta español muerto en la cárcel de Alicante en 1942, a los 31 años de edad, por disposiciones del fascista Francisco Franco. Neruda, quien tanto quiso al poeta, escribió este texto para recordarlo:

"Recordar a Miguel Hernández que desapareció en la oscuridad y recordarlo a plena luz, es un deber de España, un deber de amor. Pocos poetas tan generosos y luminosos como el muchachón de Orihuela cuya estatua se levantará algún día entre los azahares de su dormida tierra. No tenía Miguel la luz cenital del Sur como los poetas rectilíneos de Andalucía sino una luz de tierra, de mañana pedregosa, luz espesa de panal despertando. Con esta materia dura como el oro, viva como la sangre, trazó su poesía duradera. ¡Y éste fue el hombre que aquel momento de España desterró a la sombra! ¡Nos toca ahora y siempre sacarlo de su cárcel mortal, iluminarlo con su valentía y su martirio, enseñarlo como ejemplo de corazón purísimo! ¡Darle la luz! ¡Dársela a golpes de recuerdo, a paletadas de claridad que lo revelen, arcángel de una gloria terrestre que cayó en la noche armado con la espada de la luz!"

sábado, 22 de mayo de 2010

EL DESPACHO


El sábado pasado, hace una semana, hizo mutis de las escenas pública y privada el distinguido personaje de la derecha política méxicana y prominente (por lo mismo) miembro del PAN, el partido en el poder, Diego Fernández de Cevallos. La Procuraduría General de la República, la Secretaría de Gobernación y el mismo Felipe Calderón, que cobra como Presidente, han asumido el rol del policía chino, es decir misteriosos y pendejos, y detuvieron el flujo de información a la sociedad sobre las razones de la desaparición de Diego Fernández de Cevallos, El Jefe. Abrieron así los cauces al rumor y la especulación, armas que cualquier enemigo del Estado y de la población aprecian enormemente.

Fernández de Cevallos no me merece un ápice de condolencia y muchísimo menos de estima, poco creo en la caridad universal, hay gente que no merece ni el agua que consume. El Jefe Es un negro personaje que lo mismo ha intervenido en fraudes electorales mayúsculos, como el de Carlos Salinas en 1988, como en el fallido intento de desafuero de Andrés Manuel López Obrador en 2005, con el propósito de excluirlo de la contienda presidencial de 2006. Es un abogado que vive de ganar litigios multimillonarios contra el gobierno mexicano, desde su escaño en el Senado y desde su poderoso despacho legal. Es una basura política que no representa nada más allá de lo peor de la derecha mexicana. No es, como dicen sus apologistas, un elemento de gobernabilidad y mucho menos de estabilidad. Los hechos hablan por sí solos, está secuestrado por un grupo criminal muy bien organizado que pide un rescate y los ciudadanos estamos condenados a ignorar por siempre las razones de su captura y los costos, que no serán sólo familiares, de su posible liberación. Diego es una rata de las cañerías políticas, eso sí es una rata con mucho dinero. Al momento de su captura contaba con 100 mil pesos en efectivo en los bolsillos, todos sabemos que sólo los asuntos malhabidos se pagan de ese modo, en cash.

Ayer publicó el analista político Raymundo Riva Palacio un texto que revela los alcances del grupo mafioso que conduce Fernández de Cevallos y que forma parte la inmensa red de interses que tienen copado al Estado mexicano. La nota da cuenta de la capacidad de ese grupo organizado alrededor de la delincuencia legalizada para atar las manos de las instituciones de justicia de nuestro país y doblegar para sus propósitos al propio El Presidente, quien en las cortes internacionales que gusta frecuentar señaló que lo sucedido con El Jefe era un misterio, definición que bien se acomoda a su imaginario religioso y a su condición de político venido a menos, a pesar de los aplausos del Congreso estadounidense. Hoy está más claro que nunca que Calderón es un mequetrefe que baila al son que le tocan los poderosos. El de Rivapalacio es un texto que no puede dejar de leerse:

A sus órdenes Jefe.

Desaparecido “El Jefe” Diego Fernández de Cevallos, el otro jefe político y moral del procurador general Arturo Chávez, Antonio Lozano Gracia, tomó cartas en el asunto. La desaparición del líder de ese clan de abogados que tiene hegemonía sobre el gabinete de seguridad nacional del presidente Felipe Calderón y sobre las áreas de procuración de justicia federal, movilizó a sus socios y congeló al gobierno. El caso, que quede muy claro, no lo está llevando ni la autoridad federal ni, para efectos prácticos, la procuraduría de Querétaro. Es el despacho de Fernández de Cevallos, y el mariscal relevista, Lozano Gracia, quienes se apoderaron de la investigación.

Lo que hagan las procuradurías de Querétaro y la federal es complementario. Chávez, quien ha estado inusualmente activo desde la desaparición de Fernández de Cevallos, e inclusive encabezó -contra su costumbre- las primeras diligencias, está subordinado en los hechos a sus anteriores jefes, la víctima y Lozano Gracia. La información ya está siendo controlada por los socios de Fernández de Cevallos al grado que el responsable de la policía ministerial de la PGR, Wilfrido Robledo, quien tenía que estar viendo la investigación a detalle, recibe información fragmentada. El experto en secuestros de la Secretaría de Seguridad Pública Federal, Luis Cárdenas, también está marginado.

Los socios de Fernández de Cevallos no quieren que nadie se entere de nada. Controlan la investigación, controlan la información del caso, controlan la información que se disemina y los tiempos en los cuales se entrega. El núcleo de abogados en torno a “El Jefe” Diego que se encuentra dentro y fuera del servicio público, han levantado las compuertas y sellado herméticamente todas las rendijas, para evitar que los detalles de una eventual negociación con los secuestradores arruinen los contactos. No quieren decir nada y la PGR tampoco va a hacerlo hasta que les informen sobre el desenlace. De esta semana en adelante, lo que vaya saliendo, lo manejarán los socios de Fernández de Cevallos, y el vocero autorizado será Lozano Gracia, quien también fue procurador general de la República.

Aunque al ser Fernández de Cevallos un ciudadano sin cargo alguno, no hay violación alguna a la ley. Pero la iniciativa muestra, sin embargo, el poder que tiene ese grupo sobre los responsables de la procuración de la justicia, que han tenido que doblegarse ante la petición. Lo que debía haberse tratado como un asunto de Estado por el impacto político y económico que puede tener un caso como el de Fernández de Cevallos, se convirtió en un asunto de particulares, que si uno se atiene al comunicado de la familia de “El Jefe” Diego dado a conocer por Lozano Gracia, va en contrasentido de los deseos del presidente Felipe Calderón expuestos en su iniciativa de la Ley Antisecuestros, para prohibir la negociación a particulares y que en casos relevantes sean atraídos por el Ministerio Público Federal.

En este caso, los socios y la familia del desaparecido quieren comunicación directa con sus captores y negociar al margen de las autoridades. La pregunta es por qué buscaron sacar al gobierno federal de la investigación y la negociación. Sobretodo, porque con tantos asociados dentro del gobierno que trabajarían para solucionar el caso, no era necesario. Además de Chávez, en el núcleo de “El Jefe” Diego se encuentra el subprocurador para Delitos Federales, Germán Rangel, y el secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad, Juan Miguel Alcántara Soria, junto con el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, y el senador Fauzi Handam.

La ventaja que tienen al controlar todo es que las autoridades no podrán husmear en la lista de clientes del despacho, ni de los negocios realizados al amparo del tráfico de influencias de mantenerse en la investigación. Si la hipótesis más sólida que se tenía era que el secuestro pudo haber estado conectado con un cobro de facturas abiertas, ya no será posible verificarlo. Si es un asunto meramente económico, tampoco. Lozano Gracia, los socios y familiares de Fernández de Cevallos, sellaron el caso.

Al hacerlo, bloquearon la posibilidad de haber tenido una introspección de como se usa el poder en México. Fernández de Cevallos y socios tienen mucho que esconder. Públicamente se conocen sus defensas de perseguidos por el gobierno, como los empresarios Carlos Cabal Peniche y Jorge Lankenau, y también de casos más polémicos, como cuando junto con Gómez Mont, “El Jefe” Diego protegió los intereses del Hospital Santa Mónica, en la ciudad de México, al quedar expuesto cuando murió ahí Amado Carrillo, “El Señor de los Cielos”, velado en una agencia funeraria donde también era apoderado Fernández de Cevallos.

Fernández de Cevallos también fue abogado del Banco Anáhuac, contratado por uno de sus fundadores, Jorge Hurtado, sobrino del ex presidente Miguel de la Madrid, cuando lo intervino el gobierno por presuntamente manejar dinero del Cártel de Juárez. Años después de la defensa de Fernández de Cevallos del banco, el hijo de “El Señor de los Cielos”, Vicente Carrillo Leyva, declaró en la Subprocuraduría de Investigaciones Especiales sobre la Delincuencia Organizada, que su padre le había dado 30 millones de dólares a Juan Alberto Zepeda Méndez, secretario particular del empresario Jaime Camil, muy cercano al ex presidente Ernesto Zedillo, y a José Luis Sánchez Pizzini, para comprar acciones en el Anáhuac. Los dos lo niegan.

El que el despacho y los socios de Fernández de Cevallos hayan tomado control total de la investigación y la información, no tiene mucho sentido de no ser porque consideren o temen que cualquier dato que pueda ir surgiendo que no sea administrado por ellos, puede tener repercusiones de otra índole -política o económica- para “El Jefe” Diego y para sus muy prominentes asociados. Lo que ha hecho ese grupo es realmente un control de daños y comenzar a administrar la crisis, que no sólo tendrá que ver por la buenaventura del panista desaparecido, sino del despacho, para que su enjambre de relaciones e intereses sigan en las tinieblas.

Todo le demás será la palabrería usual de las instituciones de justicia atracadas por la derecha panista. Los ciudadanos mexicanos somos tratados como chusma, como turbamulta dice -o decía- El Jefe Diego.

No nos detengamos, exijamos que Felipe Calderón deje la silla y la banda presidenciales que se robó en 2006, al amparo del ejército, del PRI y de El Despacho de El Jefe.

jueves, 20 de mayo de 2010

AGENDA ABC

El Movimiento 5 de Junio, que agrupa a los padres cuyos niños perecieron en el incendio de la Guardería ABC, han organizado una serie de actividades conmemorativas que se llevarán a cabo del 1° al 5 de junio próximo en Hermosillo, Son. La justicia sigue sin verse, ha sido sustituída por declaraciones sin sentido y sin escrúpulos del Secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, y del ex gobernador de Sonora, Eduardo Bours Castelo, mejor conocido como El Chapo Bours. La venalidad apoyada en la frivolidad.

Se presenta la agenda, que puede apreciarse mejor en la página del Movimiento:



Quien mal hace, mal acaba.

viernes, 14 de mayo de 2010

BODAS DE SANGRE


Bodas de sangre, como todos sabemos -o deberíamos saber, es una pieza teatral dramática escrita por Federico García Lorca, que narra la historia de un amor que no pudo ser porque, el día de su boda, la recién desposada, quien no borró nunca el recuerdo de un noviazgo anterior, decide huir con su amor imposible, lo que ocasiona el enfrentamiento de éste con el esposo abandonado y la muerte de ambos. A mí me gustó la versión cinematográfica de Carlos Saura en 1981.

En el México de hoy, esta obra de García Lorca se corre hacia el fresa sin remedio, abandonando el rojo sangre en que murió fusilado el poeta.

El viernes 7 de mayo, se casaban en Cd. Juárez, Chih. Rafael Morales y su novia, también de apellido Morales. Los Morales decidieron que la ceremonia católica se hiciera en el Templo de la Misericordia. Rafael se trasladó desde Namiquipa para la celebración, mientras que el padrino de bodas, Jaime Morales, hermano del novio bajó desde Deming, Nuevo México.

Jaime, un joven de 25 años, vivía un día lleno de emoción. Sólo esperaba que su hermano Rafael “no se fuera a rajar” al momento de dar el ansiado “sí, acepto”. Comentó a través de Facebook: “Hoy es el gran día tan esperado, qué nervios, Juárez allí vamos jajajaja, a ver si no se raja mi carnal en el momento jajaja”, escribió el joven padre de familia a las 9 de la mañana desde su vivienda en Deming.

La ceremonia transcurrió con todas las pompas que le son propias. Una vez que la unión matrimonial estaba sellada y la misa a punto de finalizar, un grupo de ocho hombres armados llegó a bordo de dos camionetas, una Tahoe blanca y una Liberty roja. Al ver al comando, un joven invitado salió corriendo en el interior del estacionamiento de la iglesia y uno de los recién llegados le hizo varios disparos que le provocaron la muerte y quedó tendido sobre el asfalto.

Luego de este ataque, los agresores ingresaron al templo donde causaron terror entre los asistentes a la misa y se llevaron por la fuerza a Rafael Morales, a su hermano y padrino, Jaime Morales, y a un tío de la novia, identificado como Guadalupe Morales. El día de fiesta, uno de las más importantes para los Morales, terminó en “levantón”, como se llama en la jerga delincuencial y policial a los secuestros que terminan en muerte.

Una vez que los secuestradores y asesinos huyeron del lugar, un minuto después, pasó una unidad de la Policía Federal a la que las angustiadas familias llamaron para denunciarles lo sucedido, pero no les hicieron caso.

Como en todas las tragedias, la comedia se hizo presente. La noticia no fue asimilada en los primeros momentos. En Twitter las reacciones fueron diversas. Hubo quien supuso que todo era una artimaña del novio para no casarse: el usuario @carlosdelvillar escribió: "Secuestran al novio y a dos padrinos en plena boda en México… pero será cierto o fue para salvarse su vida para siempre?", en tanto que @Hijadesam57 tuiteó "Eso de un levantón en Chihuahua donde en plena boda se llevaron al novio, ñaaaa a que lo llevaron a las Vegas a gozar y eran sus cuates" y @SophieDLempicka reclamó: "vaya estrategia para rajarse". "Le robaron al novio el dia de la boda literalmente xDDDDDDDDDDD" escribió @Feelthemusic62 y @simmons2000 dio Retweet a la noticia y agregó "eran los simuladores para salvar al novio sin levantar sospecha".

Pero la vida es a veces más cruel. A principios de esta semana la policía local de Ciudad Juárez encontró en el interior de un vehículo cuatro cadáveres. Eran los del novio de 29 años, el padrino y el tío que fueron “levantados” por el comando armado en el altar del templo católico, así como un cuarto hombre que permanece en calidad de desconocido. Los cuerpos mostraron señales de haber sido torturados y asfixiados, además de que sus cuerpos fueron marcados con dibujos de alacranes y de caras de marrano.

De los asesinos nada se sabe y seguramente nada se sabrá. Se les señaló como integrantes del crimen organizado, esta categoría tan útil a policías y políticos a la hora de evadir las responsabilidades de procurar y hacer justicia. Hace cosa de un mes, por determinación de las agencias de seguridad gringas, el ejército mexicano abandonó la zona urbana de Juárez y se apostó en las inmediaciones rurales, siendo sustituido por cinco mil policías federales, de esos mismos que ignoraron la desesperación de las familias en la iglesia.

Ese viernes por la mañana, Carlos Morales, el apátrida y villano que ocupa la Embajada de Estados Unidos en México, se ufanaba en conferencia de prensa en Cd. Juárez de los grandes logros que en materia de seguridad él y sus colaboradores mexicanos han alcanzado, es decir, lo declaraba a nombre de los secretarios de Seguridad y de Gobernación. Con el mayor descaro, este sicario de apellido Morales, como el del novio ultimado, ha asumido el negro rol de orquestar en nuestro país la más aviesa intervención extranjera, valiéndose de la debilidad política (y mental) de Felipe Calderón.

¿Hasta cuándo los mexicanos habremos de soportar este charco de sangre que han creado las 25 mil muertes de la guerra al narcotráfico desatada sin clemencia ni conciencia por Felipe Calderón?

No esperemos mucho, exijamos: ¡Fuera Calderón!

jueves, 13 de mayo de 2010

miércoles, 12 de mayo de 2010

A FEDERICO GARCÍA LORCA

Sal tú, bebiendo campos y ciudades,
en largo ciervo de agua convertido,
hacia el mar de las albas claridades,
del martín-pescador mecido nido;

que yo saldré a esperarte, amortecido,
hecho junco, a las altas soledades,
herido por el aire y requerido
por tu voz, sola entre las tempestades.

Deja que escriba, débil junco frío,
mi nombre en esas aguas corredoras,
que el viento llama, solitario, río.

Disuelto ya en tu nieve el nombre mío,
vuélvete a tus montañas trepadoras,
ciervo de espuma, rey del monterío.


Rafael Alberti

lunes, 10 de mayo de 2010

viernes, 7 de mayo de 2010

Apocalipstik

El 8 de marzo, Carlos Monsiváis presentó su libro más reciente "Apocalipstik" y del cual transcribimos el capítulo No. 32, El Chateo, donde más de uno nos veremos reflejados:

En Internet lo que se da es maravilloso, el esplendor de la mitomanía colectiva. El ligue en el chat lo que tal vez sea "el chateo lúbrico", es formidable porque los chateadores se enfundan personalidades descomunales, cualidades físicas, dimensiones inacabables. Como nunca, la gente deposita en el Internet la personalidad, el cuerpo, el atractivo, la cantidad de orgasmos por noche que quisiera tener. Y el anonimato facilita las invenciones.

Antes todos firmaban: "Pedro Infante", ahora firman "Hugh Jackman", o "Matt Damon", y quieren ser aceptados por lo que obviamente no son, y al no tener ya el contexto del físico verdadero, el chateo alcanza extremos gloriosos. Es otro modo de reducir la idea del amor a la "declaración de bienes" que cada uno hace de sí mismo en función de su fantasía. Si algo logra Internet es dejar al lado la función del amor, porque además, el amor exige las imágenes.

Lo digital es la consigna del ahora, y el chat o el chateo reinstala el arte de la conversación "Hola. Tengo 22 años de edad, ojos azul cielo no contaminado, cuerpo de parar el tráfico de aviones y lo demás lo descubrirás a solas". También, de acuerdo con el rumor, la obsolescencia planeada ya incluye a los seres humanos.

-Hola, ¿cuál es tu nombre?
-Arturo, ¿y tú?
-Agustín
-Qué curioso: los dos empezamos con A.
-Y terminamos en la cama.
-Bájale, bájale, ni sabemos cómo somos.
-Te adivino cómo eres: alto, de ojos verdes, cuerpo que nunca pasa vergüenzas, de buenos ingresos y con fama de no decepcionar a nadie.
-Pinche brujo, ¿qué, me estás viendo ahorita?
-No, pero eso dicen todos y a la mera hora pido que me devuelvas las entradas... La próxima voy a chatear con alguien que tenga webcam.
-Y yo le voy a pedir a un amigo que está guapo que sea él el que aparezca.
-Pues entonces no nos vamos a reconocer ninguno de los dos.
* * *

Otro ejemplo:

-¿Cómo te llamas?
-Gustavo, ¿y tú?
-Alma Delia, pero todos me dicen María del Carmen.
-¿Y por qué?
-Porque a mi mamá le gustaba el nombre de María del Carmen y estaba muy borracha cuando me llevó al Registro Civil y el juez era muy sordo y me puso Alma Delia, y luego a mi mamá le dio flojera regresar.
-No, y también me llamo Heriberto, pero mi papá tenía un compadre con ese nombre y mi mamá huyó con él.
_¡Qué mala onda! Te apuesto a que extrañaste vivir sin tu mamá.
-¿Quién no? Pero como dice un profesor que tuve, ya sólo hay familias disfuncionales. ¿Pero no vamos a hablar de lo nuestro?
-Pinche avorazado, nomás entras al chateo y ya te pones el condón.
-No hay de mi tamaño.
-Creo que sí, en las tiendas de juguetes....

Tomado de la Jornada

jueves, 6 de mayo de 2010

PARTE DE GUERRA

Que hablemos bien de lo que nos sucede a diario, pide El Presidente, quien confesó soñar con que se publicaban buenas noticias al lado de las malas. Puso un ejemplo por demás ridículo, dijo que vio en un periódico muchas planas de malas noticias y en un rinconcito perdido de una plana interior aparecía una fotografía de un soldado cargando un niño presuntamente rescatado de algo o alguien. Es decir, primero las malas noticias de los soldados que matan niños y después una buena donde se les rescata. Pero todas las noticias de las que habla Felipe Calderón se refieren siempre al ejército, se le puede considerar como vocero de la Secretaría de la Defensa. Invariablemente sus discursos mercantiles contienen el parte de guerra, cuántas toneladas de droga decomisadas, cuántos presuntos delincuentes atrapados, las armas cubiertas de oro, en fin, todo lo que un vocero debe tener en mente de diario.

Buenas noticias siempre las hay. Quizá no sean del agrado de El Breve, eso sí. La semana pasada la Suprema Corte de Justicia ordenó la inmediata liberación de dos indígenas presas desde marzo de 2006, acusadas del secuestro de seis agentes de policía y posesión de cocaína y sentenciadas a 21 años de cárcel, nada de lo cual ocurrió. Lo primero que pidieron Teresa González Cornelio y Alberta Alcántara Juan fue que las mal llamadas autoridades se disculparan por el agravio hacia sus personas y eso ya suena a mala noticia, porque quien las mantuvo presas por tan impensable cuan infame y falso delito fue el propio El Presidente y su Procurador General. Las buenas noticias no se llevan con las acciones infames, ¿será eso Mr. President?

Hoy se publicó otra buena noticia. El Juicio Ciudadano a las instituciones del estado de Sonora, que organizó ayer el Movimiento 5 de Junio, en busca de justicia para los niños muertos en el incendio de la Guardería ABC hace precisamente 11 meses, encontró culpables al ex gobernador del estado y al ex alcalde de Hermosillo y a un grupo de funcionarios involucrados en las causas del fuego y responsables de la tragedia. Ese asunto avanza para bien de la sociedad y del gobierno, pero no es noticia buena para Calderón, puesto que en los 11 meses no ha movido un dedo para hacer justicia. Será que no puede enviar tropas a Hermosillo por causas pacíficas.

Ayer los mexicanos recordamos festivamente la Batalla de Puebla, cuando el 5 de mayo de 1862, mi General Ignacio Zaragoza derrotó al ejército francés que invadía nuestro país, abriendo paso al noble austríaco Maximiliano de Habsburgo. Finalmente el rubio y sifilítico invasor llegó a la Cd. de México y se proclamó Emperador, con el apoyo del siempre afanoso clero católico mexicano, alejado de las causas populares. Más hacia el final de esa historia, Don Benito Juárez ordenó fusilar a Maximiliano en el Cerro de las Campanas, Querétaro, en junio de 1867 y se acabaron las ilusiones imperiales. Una hermosa y heroica gesta nacional. Y Felipillo aprovechó la fecha para rezongar y regañarnos públicamente, porque dizque no queremos a las fuerzas armadas como él las quiere. Vaya visión de la historia que tiene el patrón de Los Pinos, ni un cadete sin graduar es tan ajeno al sentir nacional. Pero de la no tan silenciosa invasión gringa que padecemos está de plácemes El Breve.

Es una pena tener como presidente a un tipo tan lerdo. Desde luego no es un asunto de malas o buenas noticias, sino del desastre en que tiene sumido a la nación y la forma como sueña que hace algo para reparar los daños que su misma persona acarrea. Felipillo usa la mentira repetida como verdad que se asumirá por extenuación. A falta de legitimidad, de credibilidad o siquiera de estima popular, El Presidente se inventa logros indecibles. Desde el año pasado, cuando dijo que salvó a la humanidad de la influenza, ha venido autoproclamándose redentor de todas las causas. Hace unos días dijo que salvó a México del quinto jinete del Apocalipsis, la crisis económica revuelta con las desgracias de su guerra antinarco; que la economía va en caballo de hacienda y que la seguridad nacional va por buen camino. Todo es mera falsedad en boca de un pobre politicastro. Lo bueno es que nadie le cree ni lo que dice que come. Las balandronadas de hoy sobre el crecimiento histórico del empleo y el verdadero tsunami de inversión extranjera que nos llegará, se deshacen solas cuando uno compara las cifras que ofrece con las que existían antes de la crisis.

El Chapo Calderón ha abandonado definitivamente sus obligaciones como presidente. Sus esfuerzos militares por legitimar el asalto a la silla presidencial están pasando ya al control de las agencias de seguridad estadounidenses. Las noticias de El Presidente sobre la economía son un inútil afán por generar percepciones buenas sobre su persona, la economía la conducen los grandes capitalistas y ellos mismos se aseguran de que sus fines se vuelvan leyes, maiceando congresistas a mansalva. La educación nacional la dirige la lideresa del sindicato de profesores, la Maestra Gordillo. Los asuntos laborales los atiende su sicario de la Secretaría del Trabajo, centrado no en la generación de mejores condiciones laborales y mayor empleo, sino en el destrozo de las organizaciones gremiales y la modificación del marco jurídico que dé plena garantía a los inversionistas. Es tan grave y evidente la dejadez de Felipillo que los gringos ya confesaron abiertamente su preocupación por el futuro de la lucha antinarco, les mortifica que, faltando El Presidente, llegue el momento de poner fin a esa guerra fratricida que abre las puertas a su intervención. La soberanía tampoco es asunto de Calderón.

En el grupo de sus allegados, el llamado gabinete presidencial, reina el desconcierto igual que impera la angustia en todo el país. Gobernación dijo que la violencia tremenda que vivimos va, estadísticamente, a la baja. Vaya oráculo espontáneo. Seguridad Pública (existe la secretaría, amable lector, no crea que no) desdijo al adivino y dijo que no había fecha para tal acontecimiento. La Defensa nos amenazó con diez años más de guerra civil. La Marina no dio fechas pero anunció la inevitable continuación de la mortandad de mexicanos bajo las balas cruzadas. Y para acabar con la estéril discusión, que no con el problema, la DEA y la CIA reconvinieron a los agoreros, recordándoles que lo que se viene es peor. La luz de la calle alumbra más.

Si los males no tienen remedio a la vista y el responsable de atacarlos sólo los agrava, no hay mejor decisión que echar al impostor a la calle y fincarle juicio político.

¡Fuera Calderón!